Pues eso, que después de la tempestad viene la calma, y después de los festejos llega la dieta.  Y no significa que haya que renunciar a la buena mesa. Es verdad que hay que dedicar un poco más de tiempo para hacer los platos apetecibles y para variar el menú.

Una idea de Alex Sampedro  para la presentación de una ensalada y que yo fui repitiendo con distintos rellenos. Aquí podéis ver la original.

La base es una oblea de arroz, ablandada con un spray de agua.

Se humedece la oblea con agua hasta que esté flexible. Se ponen unas hojas a nuestro gusto, lechuga, mézclum.

Añadimos espárragos blancos o verdes, tomate en tiras, pimientos asados Carne,  pescado o huevo: jamón york, pavo, pollo cocido, salmón ahumado, anchoas, bonito, bacalao ahumado, tiras de huevo cocido …

Un poquito de mahonesa, o una salsa de mostaza (dependiendo del relleno). Se envuelve apretando el relleno formando un rollo.

Se igualan los extremos y cortamos cada rollo en cuatro trozos. Los colocamos verticales en el plato y acabamos con un copete de mahonesa, media aceituna o cebollino picado.

Combinando esos ingredientes hacemos una ensalada  a nuestro gusto y con la carne, pescado o huevo  tenemos una cena ligera, sana y completa.

Espero que os guste.

Este rollo de bacalao es un plato de la cocina tradicional portuguesa, Torta o Rolo de bacalhau. El relleno es un añadido mío, un puré de patata y bechamel con langostinos, en este caso. Otras veces lo relleno con gambas y bechamel. O con brandada.

Es muy sencillo de preparar y resulta muy vistoso.

 Para tomar como entrante frío me parece muy cómodo porque podemos hacerlo con antelación o guardar lo que nos sobre para el día siguiente sin que pierda nada ni de sabor, ni de textura.

El bizcocho admite variantes, yo lo he probado con y sin cebolla, con gambas y bacalao, con y sin perejil. La preparación es la misma, así que cada uno lo adapta a su gusto.

Ingredientes

Para el bizcocho

1 cebolla grande

200 g de bacalao desalado.

4 huevos

4 cucharadas de harina

200 cc de leche

Media cucharadita de impulsor (royal)

Aceite para pochar la cebolla

Sal, perejil al gusto

Para el relleno:

Pure de patata espeso

Unas cucharadas de bechamel ligera

250g de langostinos o gambas cocidos

Cocemos los langoarinos, loa pelamos. Reservamos.

Ponemos el bacalao a cocer en un cazo con agua. Lo cocemos tres o cuatro minutos. Dejamos que enfríe un poco para poder escogerlo y limpiarlo de piel y espinas. Lo desmenuzamos.

Pelamos la cebolla y la cortamos en juliana fina. La ponemos a dorar en una sartén con un chorro de aceite a fuego lento. Removemos de vez en cuando hasta que coja un poco de color.

Echamos el bacalao desmenuzado y rehogamos todo junto un momento. Retiramos del fuego y lo dejamos enfriar mientras preparamos el bizcocho.

Montamos las claras a punto de nieve con una pizca de sal. Reservamos.

Ponemos en un bol la harina junto con el impulsor, las yemas de huevo, la leche.

Mezclamos bien con las varillas. Añadimos a la masa el bacalao y cebolla, volvemos a mezclar.

Vamos añadiendo en dos o tres veces las claras montadas mezclando con una espátula con cuidado en movimiento envolvente.

Tenemos preparada una bandeja de horno o una lata forrada con papel de horno bien untado en mantequilla.

Ponemos la masa en la bandeja de horno y alisamos la superficie con la espátula.

Metemos el bizcocho al horno precalentado a 200º y lo horneamos hasta que veamos que tiene un color dorado (probamos que esté cocido, pinchándolo con una aguja o con una brocheta). Serán unos 20 minutos aproximadamente.

Sacamos del horno el bizcocho y lo volcamos sobre un paño de cocina. Retiramos el papel de hornearlo y ayudándonos con el paño lo enrollamos.

Preparamos el relleno mezclando el puré de patata con un poco de bechamel, hasta lograr una crema lisa y con consistencia. pelamos los langostinos.

Cuando haya enfriado un poco el bizcocho, lo pasamos a una fuente, lo abrimos y rellenamos con el puré y los langostinos (reservamos una cucharada para adornar el brazo).Volvemos a enrollarlo.

Adornamos con botones de puré, aceitunas, tiras de pimiento... a nuestro gusto

Podemos tomarlo tibio o frío acompañado con una ensalada.

Espero que os guste.

Cuando tenemos un buen producto no es necesario buscar  recetas muy elaboradas que lo enmascaren, es más, cuanto más sencilla sea la preparación mejor apreciamos las cualidades del ingrediente. Es el caso del bacalao de hoy:

Un lomo de skrei  excelente, cocido a baja temperatura, sobre unas patatas hervidas y un chorrito de aceite, espolvoreado con pimentón y sal gruesa. De ser pulpo sería pulpo a feira, y como es bacalao, ¿será bacalao a feira?. Admitamos este silogismo en bárbara  y vamos con la receta.

Ingredientes:

Lomo de bacalao

Patatas

Sal

Aceite

Pimentón

Cocemos las patatas con agua y sal. Reservamos.

La cocción del bacalao a baja temperatura  es ideal para la receta. Ponemos sal al agua (el bacalao es fresco) y el bacalao, lo calentamos hasta los 60º  y como normalmente en nuestras cocinas no tenemos un roner , con un termómetro de sonda procuramos mantener la temperatura entre 60º y 65º. Dependiendo del tamaño del trozo de bacalao y de que sea desalado o fresco,  serán unos 8-10 minutos.

 Los dos últimos minutos ponemos las patatas con el bacalao para que queden más sabrosas.

Sacamos la patata y el bacalao y montamos el plato: cortamos la patata en rodajas y las ponemos en el fondo del plato. Separamos las lascas del bacalao y las distribuimos por encima de la patata.

Salamos con sal gorda y regamos con un hilo de aceite de oliva.

Espolvoreamos con pimentón, en mi caso pimentón dulce, pero se puede poner picante o una mezcla de ambos (pimentón agridulce).

Listo para llevar a la mesa antes de que enfríe.

Espero que os guste.

La raya, al menos en el Cantábrico, empieza a ser bastante habitual en las pescaderías. Por fin empieza a tener el reconocimiento que a mi juicio se merece. Claro que esto es un arma de doble filo, sobre todo para el bolsillo. Pasó de ser un pescado baratísimo, con poca salida y que los pescadores solían  quedarse para su consumo, a ser un pescado muy demandado y a un precio muchas veces por encima de una buena merluza.

Normalmente  en las pescaderías ya la tienen limpia, lo que acorta su frescura, pero que con la demanda que tiene no suele correr ese peligro. En cualquier caso cuando la veo sin pelar  la compro sí o sí. La  semana pasada la encontré,  y como andábamos con la dieta a cuestas,  la  hice al vapor con salsa de limón. Un buen pescado hasta así, con una preparación tan elemental, está delicioso.

Esta raya recuerda un poco a la raya al pimentón  de los pescadores, mucho menos elaborada que la famosa  raya al pimentón de Ayamonte.  La hice con mucha cebolla, poco aceite y poco vino blanco. Creo que podemos incluirla como un plato ligero, de dieta.

Ingredientes:

Dos buenos trozos de raya

2 cebollas medianas

2 dientes de ajo

1 cucharita de pimentón  

1 cucharada de aceite

3 cucharadas de vino blanco (50 ml.)

1 cucharada de vinagre

Medio vaso de caldo de pescado o agua

Sal.

Lavamos el pescado, lo secamos y salamos, preferiblemente con sal gruesa, de cocina.

Ponemos a pochar la cebolla y el ajo picados muy finos con la cucharada de aceite y un poco de sal.  Lo hacemos a fuego muy suave porque como casi no lleva aceite tiene que hacerse en su propio jugo.

Cuando esté  la cebolla blandita y transparente añadimos el pimentón, mezclamos rápidamente para que no se queme y añadimos el vino y el vinagre. Subimos el fuego  para que evapore el alcohol. Añadimos el caldo y en cuanto hierva ponemos el pescado por el lado grueso, bajamos de nuevo el fuego y lo dejamos unos cinco minutos.

Le damos la vuelta cuando veamos que está hecho por ese lado, y en tres o cuatro minutos estará listo para servirlo.

Lo acompañé con patatas hervidas y salteadas con mantequilla y perejil.

Queda

Queda muy sabrosa, y como siempre os la recomiendo para los niños, al no tener espinas les resulta fácil de comer.

Espero que os guste. 

A la importancia es una preparación que como la salsa verde da mucho juego. La receta original es patatas a la importancia, pero yo la he ampliado a pescados acompañados por las patatas, en este caso un bacalao.

Y con un atajo, de forma que el plato podemos prepararlo en 10 minutos:usar patatas previamente cocidas con piel que podemos tener hechas con antelación o para aprovechar una patata que nos haya sobrado de otro plato.

Lo hice con un lomo de bacalao fresco, pero se puede usar el  de salazón (desalándolo en casa) o el que ya viene desalado, en cualquier caso queda un plato muy rico.

Ingredientes:

Lomo de bacalao

Unas almejas

Una cebolla

2 dientes de ajo

Perejil

1 patata  cocida con piel

Sal

Aceite

Vino blanco (medio vaso)

Harina para rebozar

Huevo batido para rebozar

Ponemos unas cucharadas de aceite en la sartén y doramos los ajos muy picados. Picamos en brunoise fina la cebolla y la añadimos a la satén con el ajo. Pochamos a fuego medio.

Añadimos media cucharada de harina, dejamos que se tueste un momento y echamos el vino. Dejamos evaporar y añadimos el perejil.

Echamos las almejas para que se abran. Lo dejamos al mínimo mientras rebozamos las patatas y el bacalao.

Batimos el huevo y le ponemos sal.Pelamos la patata y la cortamos en rodajas de 1 cm aproximadamente. Pasamos las rodajas por harina y por huevo batido.

Las freímos en aceite caliente hasta que estén doradas por los dos lados.  Las sacamos a la salsa.

Cortamos el  lomo de bacalao en medallones, en este caso ponemos sal porque es fresco.

Pasamos por harina y huevo y lo freímos en aceite caliente, pero  a fuego más suave que con las patatas, porque el bacalao no está hecho.

Cuando estén dorados los pasamos a la salsa.

Dejamos un momento de reposo para que tome bien el sabor.

Emplatamos  poniendo en el fondo unas patatas, encima los medallones de bacalao y  unas almejas salteadas. Salseamos con el resto de salsa. 

( El pan al gusto…  jajajaja, que viene muy bien aquello de toma pan y moja).

Espero que os guste.