Voy a publicar esta receta de pasta antes de pasar a limpio los apuntes de Giuseppe D’Urso en el curso de cocina italiana, porque seguro que me catean jajajaja.
El ingrediente principal y que da el toque especial a esta pasta es el concentrado de setas del fondo de congelador.
Este preparado es para mí un básico para montones de recetas, y como pasa casi siempre con lo casero, nada que ver con los preparados comprados.
Poco hay que explicar, sencilla en los ingredientes y en la preparación.
Necesitamos:
Pasta
Concentrado de setas
1 vaso de leche
Una nuez de mantequilla
Parmesano rallado
Una cucharadita de maizena (25g aprox.)
Sal
Ponemos al fuego una olla con agua y sal. Y aunque en la foto se ve que le puse un hilo de aceite, es algo que he aprendido en el curso: NO se pone aceite para cocer la pasta.
Cuando hierve el agua se echa la pasta y se remueve un momento. Se cuece los minutos que se indica en el envase.
Mientras, preparamos la salsa. Ponemos en un cazo o en una sartén el vaso de leche (reservamos unas cucharadas) una pizca de sal y la mantequilla. Disolvemos la maizena en la leche reservada y añadimos a la sartén cuando hierva.
Removemos hasta que espese y ponemos el parmesano rallado, removiendo hasta que se funda. Añadimos una buena cucharada de concentrado de setas y mezclamos.
Sacamos la pasta sobre un colador, lo movemos para que quede bien escurrida. NUNCA lavar ni refrescar la pasta cocida.
Devolvemos la pasta a la olla y echamos la salsa. Mezclamos y dejamos un momento para que tome el sabor. Listo para llevar a la mesa.
Espero que os guste.