Una publicación que tengo pendiente desde hace más de dos años es la de galletas decoradas. Creo que con la esperanza subconsciente de que pasen de moda como sucedió con los cupcakes y otras modernidades de lo que se ha dado en llamar repostería creativa.
Hay una total contradicción entre lo que pienso y lo que acabo haciendo. Creo que una galleta decorada es una manera preciosa de estropear una buena galleta de mantequilla. Soy una detractora de estas galletas y sin embargo no creo que haya muchas personas no profesionales que hayan hecho tantas. Más o menos rondando las mil. ¡Viva la incoherencia!
Me da bastante pereza porque es un tema extenso y para hacer las cosas bien se necesitan varios capítulos. Debo de ser muy torpe y muy lenta de entendederas porque en cuatro o cinco horas que suelen durar los cursos de galletas a mí no me darían ni para saber cómo se hace la masa, se corta y se hornea, y ya no hablamos de hacer glasas, teñirlas y manejar las mangas y boquillas.
Vamos paso a paso, hoy dedicado a la galleta. Puede hacerse alguna variante (aromas, cacao), pero la galleta “universal” es una galleta de mantequilla.
Vamos a hacer una galleta para grabar o dibujar con rodillo, o simplemente para tomarla como galleta. A disfrutar con gatitos que se enamoran, que sueñan con ratones o a grabar el cariño con el que las hacemos.
Ingredientes:
200 g de mantequilla
150-180 g de azúcar
1 huevo
Limón o vainilla ( 5 ml de un buen extracto)
400 g de harina de trigo para repostería
Una pizca de sal
El azúcar puede ser blanco, el normal, o molido (azúcar glas) pero no del comprado porque tiene entre un 10 y un 20% de almidón añadido. Si se pone molido se trabaja con más facilidad para conseguir una textura fina.
La mantequilla se pone fría cortada en dados para estas galletas. Para las galletas lisas para decorar con glasas o fondant que exigen enfriar la masa antes de cortarla se puede trabajar con mantequilla a punto pomada.
Se corta en dados la mantequilla y se mezcla bien con el azúcar, podemos hacerlo con un tenedor, con una cuchara de madera, para no aportar el calor de la mano.
Cuando esté bien integrado, ponemos el aroma, yo puse vainilla, 5 ml, añadimos el huevo batido con la pizca de sal. Mezclamos.
Vamos añadiendo harina en dos o tres veces.
Y ahora si queremos, amasamos con la mano. La cantidad de harina puede variar un poco de una marca a otra, pero será una pequeña variación de 20 g arriba o abajo.
En cuanto la masa no se pegue a los dedos estará lista. hacemos una bola y la cubrimos con film.
Si no las vamos a grabar, el grosor que me gusta es de 3 mm. Extendemos cada trozo usando unas regletas y film. Cuando la tenemos bien extendida metemos la plancha de masa al frigo hasta que esté bien rígida ( de 1 a 2 horas).
Luego cortamos con el cortador elegido.
Deben quedar unos cortes limpios con los bordes bien marcedos.
Si vamos a pasar un rodillo con grabado, extendemos la masa a un grosor de 5 mm.Extiendo la masa entre film, he probado a hacerlo con papel de hoenear y el resultado no es tan bueno, porque no queda tan lisa y el papel acaba absorbiendo grasa que resta a la galleta. Usamos unas regletas para que quede de igual grosor toda la masa.
Retiramos las regletas,cambiando a las de 3 mm, espolvoreamos ligeramente con harina la masa y el rodillo. Lo pasamos presionando sobre toda la superficie. Cortamos las galletas con la forma elegida y las metemos al frigo otra media hora. Amasamos los recortes y repetimos los mismos pasos hasta acabar con la masa.
Se hornean en horno precalentado a 180º en torno a 10 minutos (depende del tamaño y el grosor de la galleta). Dependiendo de lo doradas que nos gusten les damos uno o dos minutos más. Si nos gustan blanquitas, en cuanto estén dorados los bordes las sacamos. Las pasamos a una rejilla hasta que enfríen.
Espero que os gusten.