Muchas veces publicamos recetas más elaboradas y se nos pasa poner la receta básica.
Dependiendo de la zona los picatostes se empapan una vez fritos en almíbar o se rebozan en azúcar y canela. Éstos últimos son los de la receta.
Si pensamos en hacer torrijas, importante recordar comprar pan el día anterior.
Para una barra de pan de medio kilo, necesitamos ¾ l. de leche, 8 cucharadas de azúcar, 1 palo de canela, piel de limón, huevo batido para rebozar y aceite refinado 0.4 de oliva o aceite de girasol, una pizca de sal, azúcar y canela para el rebozado final.
Ponemos un cazo con la leche, azúcar, palo de canela y piel de limón y la pizca de sal a calentar hasta que hierva. Dejamos que entibie y así tome los aromas de limón y canela.
Mientras cortamos el pan en rebanadas de 1.5cm. aproximadamente y las colocamos extendidas en una fuente plana.
Cuando la infusión de leche esté templada la echamos sobre el pan y dejamos que se empape bien. Les damos la vuelta para que se calen por los dos lados.
Batimos el huevo y ponemos a calentar una sartén con aceite.
Para aromatizar y quitar el amargor, freímos una piel de limón o de naranja antes de empezar con las torrijas.
Pasamos las rebanadas por el huevo y las freímos en el aceite caliente, dándoles la vuelta para que se doren por ambas caras. Se sacan sobre papel de cocina.
Cuando acabamos de freir las torrijas las pasamos por una mezcla de azúcar y canela.
Las ponemos extendidas en una bandeja.
Espero que os guste.