Normalmente cuando hago croquetas, preparo para guardar y congelar. Esta vez con las croquetas de champiñón no tenía demasiado sitio en el congelador y preparé poca cantidad, pero suficiente como para que me sobrara para hacer unas chuletas villarroy.
Tomo poca carne de cerdo, creo que junto con la pollo es de las carnes que más diferencia hay con las de antes. Es difícil conseguir aquel lomo sabroso que llenaba la casa con un olor delicioso. Pero de vez en cuando si me apetece una chuleta compro de crianza ecológica y si puede ser ibérico mejor.
Y para que conserve más sabor y quede más tierna me gusta rebozarla o empanarla. Si además le ponemos un poco de bechamel de champiñón tenemos un plato rico, rico.
La bechamel, es la de las croquetas de champiñón de ayer. La receta AQUÍ.
Ingredientes:
Chuletas de cerdo
Bechamel de champiñón
Huevo batido
Pan rallado
Sal
Ajo en polvo
Aceite para freír
Batimos el huevo con la sal y el ajo.
Si nos gusta la carne más hecha podemos pasar la chuleta por la plancha especialmente por el lado donde vamos a poner la bechamel.
Extendemos una buena cucharada por una cara de la chuleta, alisamos y la rebozamos ligeramente en pan. La pasamos por huevo y de nuevo por pan.
Freímos en aceite caliente dándole la vuelta para que quede bien dorada por los dos lados.
La sacamos sobre papel de cocina.
Servimos bien caliente. Yo puse una guarnición de champiñones salteados. Otros acompañamientos que se me ocurre que pueden quedar bien, puré de patata, arroz blanco o patatas fritas.
Espero que os guste.