Una cena rápida de preparar y muy rica.
Son pocos ingredientes y de los que normalmente hay en casa: pan de sándwich, queso (yo puse lonchas y mozzarella rallada), unas anchoas, cebolla frita crujiente, huevo para rebozar.
Si no queremos entretenernos, ponemos las rebanadas de pan tal cual. Yo las corté con un cortapastas.
Se pone en cada rebanada de pan una loncha de queso de sándwich, dos o tres anchoas, queso mozzarela rallado (o el que más nos guste ), un poco de cebolla frita.
Cubrimos con otra rebanada de pan y presionamos levemente para conpactarlo.
Batimos un huevo y rebozamos los emparedados por ambos lados , empapandolos bien.
Se fríen en una sartén bien caliente con una cucharada de aceite,
les damos la vuelta para que se hagan por los dos lados, los sacamos cuando estén dorados y el queso asome fundido.
Con una ensalada verde completamos el plato.
Yo los acompañé con palitos de hojaldre y anchoa que me quedaban de un aperitivo.
Espero que os guste.