Que tener a mano una masa de hojaldre da mucho juego no es ningún secreto. En un momento podemos preparar un postre o un plato salado. Desde unos pastelitos de crema o mermelada hasta una empanada o unas empanadillas fritas.
Estos días viene mi ahijado a comer a casa, y como con la fruta le pasa lo mismo que a mí ( nos cuesta encontrar el momento de tomarla, y de postre no nos apetece), hago algún postre sencillo, y rápido de preparar : natillas, copas de fruta, torrijas de bizcocho, flan, puding con fruta, fritos de leche.
Uno de esos postres podrían ser tartaletas de hojaldre con mermelada de ciruela y ciruelas de California o de crema y mermelada de melocotón. Estupendos para el café de la sobremesa o para una merienda.
Ingredientes:
Una plancha de hojaldre (10)
Azúcar (o canela)
Mermelada de ciruela claudia
10 ciruelas de California
10 cucharadas de crema
Mermelada de melocotón
Para forrar los moldes de las tartaletas de hojaldre se puede hacer de dos formas:
Recortando círculos de hojaldre de tamaño algo mayor que los moldes que vayamos a usar.
O al estilo portugués , como hacen para los pasteis de Belém, o pasteis de nata.
Se espolvorea la plancha de hojaldre con azúcar o canela, o con las dos cosas. Se enrolla por el lado más corto formando un rulo. Se corta el rulo en diez trozos. Se pone un trozo en el fondo del molde y con los pulgares se va aplastando y recubriendo el molde. Hay que procurar que el fondo y las paredes queden muy finas y el reborde superior un poco más grueso. Así, al hornearlos este borde crece más y los pasteles quedan más bonitos. Pinchamos el fondo con un tenedor.
Para los de ciruela : ponemos una cucharada de mermelada de ciruela claudia (casera) y una ciruela pasa sin hueso.
Para los de melocotón : cubrimos el fondo con una cucharada de crema ( yo puse crema de yema) y encima una cucharadita de mermelada de melocotón.
Ponemos los pasteles en la bandeja del horno ( mejor si la forramos con papel o con una lámina de teflón.) y la metemos al horno precalentado a 200º unos 15-18 minutos, hasta que veamos que el hojaldre está dorado. Sacamos y dejamos enfriar. Los desmoldamos y los pasamos al plato a la bandeja de servir.
Tanto los de ciruela como los de melocotón han tenido muy buena acogida, y no podría recomendaros uno en especial, mejor lo dejo a vuestro gusto.
Espero que os guste.