Un pudin es un postre fácil de hacer, y casi siempre tenemos en casa los ingredientes que necesitamos para prepararlo porque nos sirve desde pan atrasado hasta unos croissants que nos hayan quedado duros.
Si le añadimos una fruta fresca o en conserva, unas pasas, o unos orejones (albaricoques secos), tenemos muchas posibilidades para variarlo.
Si hay una fruta que se preste a este tipo de postres es sin duda la cereza. Si estamos en temporada, las usamos frescas, pero podemos hacer un pudin con cerezas confitadas, deshidratadas, con confitura...
Pero aprovechando que aún encontramos cerezas o picotas en la frutería, y que me quedaban unos croissants un poco secos para tomarlos, hice un pudin muy sencillo, y que nos gustó mucho.
Ingredientes:
4 huevos
400 ml de nata o
200 nata/200 leche
4 cucharadas de azúcar
Una cucharadilla de flanín
2 croissants
300 g de cerezas
Azúcar avainillado
Mantequilla para untar el molde
Deshuesamos las cerezas y si son grandes las cortamos en mitades. Cortamos los croissants en rebanadas finas, reservamos.
Untamos un molde con mantequilla (tipo cake).
Ponemos una capa de rebanadas de croissant en el fondo del molde. Encima ponemos una capa de cerezas. Repetimos otra capa de croissant y de nuevo ponemos encima otra capa de cerezas. Terminamos con cerezas.
Batimos los huevos con el azúcar (4 cucharadas), y con el azúcar avainillado. Añadimos a los huevos batidos la nata o la nata y leche, reservando unas cucharadas para disolver la cucharadita de preparado de pudin (flanín), que también incorporamos al batido.
Mezclamos bien batiendo un momento hasta que notemos que se ha disuelto el azúcar.
Echamos la mezcla de huevo en el molde repartiendo por encima para que quede bien calado.
Se puede cocer en el horno al bañomaría, como los pudin de caramelo, pero para este pudin no es necesario, y haciéndolo directamente se tarda menos en cocer.
Metemos al horno precalentado a 180º, abajo unos 15 minutos, luego arriba-abajo con aire otros 15 minutos. Comprobamos que está hecho pinchando con una aguja metálica, tiene que salir limpia.
Dejamos enfriar un rato antes de desmoldar. Se puede desmoldar directamente a la bandeja de servir volcándolo como se hace con los pudin con caramelo , pero a mi me gusta más dejarlo con las cerezas hacia arriba.
Para que quede así, primero lo desmoldamos dándole la vuelta sobre una bandeja, colocamos otra bandeja encima y le damos la vuelta.
Se puede tomar frío o templado. Si lo servimos tibio con un helado de vainilla es delicioso.
Espero que os guste.