Aprovechando los dos nidos que había preparado, puse unos champiñones con un huevo escalfado.

Se lavan y cortan los champiñones. Se sazonan con ajo y perejil y medio vaso de vino blanco.

Se dejan unos minutos macerando y luego se escurren para rehogarlos en un poco de aceite.

Cuando ya están blandos se les pone la sal y se añade el vino de macerarlos con una punta de maizena,

se deja que espese un poco la salsa y se reservan.

Se escalfan los huevos , abriéndolos sobre un cazo de agua hirviendo con sal y dos cucharadas de vinagre, se recogen con una espumadera.

Echar los champiñones en los nidos de patata y poner el huevo encima.

Espero que os guste.

Esta receta es de las que conservo con un cariño especial.Recuerdo que de muy niña cuando mi abuela los hacía, no me despegaba de su lado y me quedaba maravillada porque “se movían” solos…
Pocas veces me habréis leído ensalzando mis propias recetas… con esta hago una excepción… son riquísimos, os invito a que los hagáis, y veréis como a partir de entonces la repetís, es una guarnición sabrosa y elegante, que siempre sorprende. (uy, qué rollo me estoy montando..)

INGREDIENTES: Puré de patata espeso, 2 huevos, dos cucharadas de harina, sal, y una cucharadita de levadura química. Unas cucharadas de leche si queda demasiado espesa la masa.

Se mezcla uno a uno los huevos con el puré, hasta hasta que quede una masa uniforme y sin grumos.Tamizamos la harina con la levadura y la agregamos en forma de lluvia, mezclamos.

Para freirlos usamos una sartén honda o un cazo, para que floten y no den en el fondo, así se voltearan solos.

Tienen que quedar por dentro esponjosos y suaves por fuera.

Sacamos sobre papel de cocina para que escurra bien el aceite. Se sirven calientes.
Se pueden calentar en el microondas un minuto si los hemos hecho con antelación.

Espero que os gusten y que saquéis provecho a la receta.

Esta receta nos da un respiro para cuando andamos con agobios de comidas o cenas de invitados. La podemos tener preparada a falta de meterla al horno 5 minutos, mientras se toma el aperitivo.

Sencilla y humildísima patata, que se deja hacer casi de todo…. Hasta que la hagamos rodajitas.

Con eso , un trozo de merluza y 5 langostinos, tenemos un plato lucido y muy rico.
Ingredientes para las brochetas: patatas cocidas con piel ( elegirlas más bien alargadas y de tamaño similar),Un lomo de merluza sin piel ni espina y unas colas de langostinos , sal, aceite, Ingredientes salsa: aceite, ajo y perejil.

Se cuecen las patatas , se secan y se pincelan con aceite ( para que no se resequen).

Se cortan en rodajas, se reservan.
El lomo de merluza se corta en filetes y se reserva.

Se pelan los langostinos y se les quita el “ hilo” negro que tienen en la parte de arriba ( amarga y es arenoso). Se reservan.

Ya tenemos preparados todos los ingredientes de la brocheta.

Se montan las brochetas intercalando las rodajas de patata con un filete de merluza y un langostino .

( es importante poner las rodajas en el orden que formaban la patata, para que quede con buena forma). Se salan.
Se ponen las brochetas en una fuente de horno y se les pone un chorro de aceite por encima. Se hornean a 200º unos 5 minutos (hasta que veamos que la merluza y el langostino estén hechos).

Mientras se hace la brocheta en el horno preparamos la salsa de aceite de perejil. Si no tenemos perejil fresco, podemos usar congelado.

Ponemos en el mortero el perejil picado ( yo usé congelado que ya estaba picado)
El ajo picado y machacamos bien, luego vamos añadiendo un hilo el aceite,

removiendo con la mano del mortero para que quede bien impregnado.

Sacamos las brochetas del horno y las ponemos en los platos o en una sola fuente.

Añadimos a la salsa el jugo que hayan soltado las brochetas..

Ponemos una cucharadita de salsa sobre cada brocheta y ya están listas para llevar a la mesa.

Más de cerca

Espero que os guste.