¡Hoy toca publicar! Y es que la imaginación y la cabecita de estas amigas mías no paran.
He estado ausente las últimas semanas en otros quehaceres y no sé muy bien cómo se gestó la idea. Se trata de hacer cada una, una receta de otra del grupo y publicarla el mismo día. Creo que Alicia (Olor a hierbabuena) y Marga (el puchero de Morguix),lo explicarán mucho mejor porque son las madres de la ocurrencia.
Mi receta es de Ángeles, del blog El Ágora de Ángeles. Tengo hechas varias recetas de ella, pero cuando me lo comentaron no tuve ninguna duda de cuál iba a ser la elegida: el mantecado de Avilés y el bollo de pascua. Por muchas razones: Porque el día que nos conocimos personalmente me regaló un mantecado (es mi bizcocho favorito), porque después asistimos juntas a un curso de mantecado, porque en Navidad me regaló los moldes típicos del bollo y porque cada año espero impaciente para ver su bollo de Pascua, siempre impresionante y precioso adornado.
Sigo al pie de la letra su receta de mantecado este año y hasta me atrevo a poneros un bollo sencillín que hice para un ahijado adoptivo.
Es un bizcocho cuatro cuartos, es decir, la misma cantidad de los cuatro ingredientes :
Huevos
Mantequilla
Azúcar
Harina
Puse 250g de cada ingrediente (menos de harina que puse 200g y 50 de maizena). Sale la cantidad justa para el molde de cake de 1 ½ l.
Encendemos el horno y calentamos a 180º.
Encamisamos un molde de cake o los del bollo, untando bien en mantequilla y enharinando. Sacudimos el molde para que se desprenda la harina sobrante.
Empezamos pesando los huevos ( usé 4). Tomamos la misma cantidad de azúcar glas y la tamizamos. Pesamos la mantequilla (punto pomada). Y por último maizena y harina tamizadas (se pone el 20% del peso de maizena). Se le puede poner una cucharadita de impulsor.
Separamos las claras de las yemas.
Montamos las claras con la mitad del azúcar. No necesitamos un merengue demasiado firme. Reservamos.
Blanqueamos las yemas con el resto del azúcar hasta que estén muy cremosas.
Vamos añadiendo la mantequilla poco a poco, en daditos, a las yemas.
Cuando acabamos de incorporar la mantequilla, mezclamos con las claras montadas. Lo hacemos en varias veces. Primero ponemos un poco de merengue y mezclamos groseramente para igualar texturas y que nos resulte más fácil conseguir una masa homogénea sin puntitos de merengue.
Por ultimo añadimos la mezcla de harina, maizena e Impulsor si lo hemos usado, en forma de lluvia, tamizando de nuevo con un colador.
Mezclamos bien con la espátula con movimientos envolventes y si es necesario acabamos mezclando con la mano.
Pasamos la masa al molde y alisamos ligeramente con la espátula. No debe sobrepasar los dos tercios de altura del molde.
Metemos al horno y bajamos la temperatura a 170º para los moldes de bollo, o moldes más planos. Para el molde de cake yo lo cuezo a 160º.
Esta cantidad en el molde de cake tardará unos 70 minutos en hacerse.
Comprobamos que esté hecho, sacamos del horno y en unos minutos desmoldamos.
Si lo vamos a consumir en el momento dejamos que enfríe cubierto con un film.
Se baña con glasa muerta:
Ponemos en un bol azúcar glas (180 g) y añadimos dos cucharadas de agua tibia, mezclamos con una cuchara hasta tener una glasa lisa. Si la queremos más espesa añadimos más azúcar.
Bañamos el bizcocho con la glasa y dejamos secar (si tenemos prisa podemos meterlo al horno y en un momento se nos seca con el calor residual.
Espero que os guste.