Hoy los hice para aprovechar unas cucharadas de nata y unos bizcochos de soletilla secos que quedaban.
Es un postre que visto en el plato parece frágil y de difícil transporte, pero qué va!.
Durante algún tiempo tuve que preparar la comida en situaciones muy precarias de espacio y menage y en un tiempo record, y este postre fue un hallazgo. Lo llevaba hecho de casa y como el emplatado y la decoración son sumamente sencillos… en dos minutos estaba listo.
Se puede preparar como tarta, en ese caso mejor usar una plancha de bizcocho genovés.
Los ingredientes: unos bizcochos, nata montada, melocotón en almíbar y si queremos unas cucharadas de gelatina de melocotón ( casera ).
Las proporciones, ( por ración) : medio melocotón , una cucharada de nata montada, un bizcocho de soletilla, una cucharada del almíbar del melocotón.
Cortamos en trocitos pequeños el melocotón y lo mezclamos con la nata.
Remojamos el bizcocho que hemos recortado con el aro en el que vamos a hacerlo.
Forramos el aro con una tira de acetato.
Ponemos en la base el bizcocho remojado,
encima una cucharada de la mezcla del melocotón y nata.
Remojamos otro trozo de bizcocho, rellenamos hasta llenar con la mezcla y con una espátula alisamos. Lo metemos al frigo hasta la hora de presentarlo o de tener que transportarlo ( en este caso lo hacemos sin quitarle el aro ).
Para emplatar: ponemos los montaditos en el plato, con cuidado retiramos el aro y despegamos la tira de acetato.
Cortamos un gajo de melocotón y los fileteamos sin llegar a separar abrimos en abanico y colocamos encima de los pasteles. Se puede completar con media guinda o con un trozo de fresa.
Si se tiene gelatina de melocotón se pone una cucharada al pie de los pasteles. También. puede ponerse un fondo de salsa de alguna fruta que nos guste y combine con el sabor del melocotón.
Admite congelación y si nos apetece podemos tomarlo como helado ( mantener en el congelador y pasarlo al frigo unas horas antes.
Espero que os guste.