Hay cosas que son muy difíciles de explicar, como por ejemplo que diferencia hay entre frejoles y judías verdes. A nivel lingüistico no hay ninguna, son palabras sinónimas,para mí si que son diferentes.
Reservo el termino de fréjoles para cuando son de verdad, de huerta, de esos que no se encuentran en la frutería.
Yo los "encontré" en una cesta, con unas cuantas joyas: unos fréjoles, huevos de gallina feliz, y un mantecado de Aviles delicioso.
Ya podeís imaginar que llegué a casa más feliz que Caperucita con mi cesta. Gracias, Ángeles, eres un encanto.Me has llenado el día de exquisiteces.
Preparé los fréjoles en su jugo, sin nada, nada de agua, ( las tiffany's, jajajaja). Es también una receta reversible, puede ser una ensalada, o un plato de cuchara.
En la ensalada puse huevo cocido y un chorrito de aceite, simplemente deliciosa.
Tengo un tupper para María y Ricky, y espero resistir la tentación de meter el tenedor.
Para la merienda otra delicatessen, el mantecado, que como su nombre indica es de un sabor delicado a mantequilla,y de una suavidad inigualable. Yo no lo hice nunca, pero os dejo la receta de Ángeles
En resumen, ha sido un día lleno de estupendas comidas.
Espero que tengais la oportunidad de conseguir unos fréjoles y que los disfruteis tanto como yo.