Gastromanía
Completo la entrada con el paso a paso y aprovecho para desearos un felicísimo 2013.
Esta bandejita para tod@s vosotr@s.
Crujiente de peladillas con crema de turrón
Ingredientes:
Para la galleta crujiente:100g de azúcar,40g de harina, 40g de mantequilla,60g de clara (2 claras aprox)., peladillas picadas.( hice también versión piñones y pistachos).
Para la crema de turrón:
100 ml de leche,20 g de azúcar,30g de yema (2 yemas aprox), 1 y 1/2 hojas de gelatina, 200g de turrón, 300ml de nata.
Se funde la mantequilla y se añaden los demás ingredientes ( menos las peladillas): harina tamizada, azúcar y claras.
Se mezcla bien con las varillas hasta que quede una crema homogénea. Dejamos reposar 24 horas.
Se pican en el mortero las peladillas.
Para hornear los crujientes:
Se extienden rectangulos de masa sobre papel de horno ( podeis usar una plantilla hecha con cartón). tienen que quedar bien finos.
Se espolvorea con las peladillas y se hornea a 180º hasta que estén doradas,(unos 6 minutos).
En cuanto se enfrían se despegan de la lámina de horno (o del papel) sin ninguna dificultad.
En version pistacho y piñones:
La crema de turrón también podemos hacerla el día antes y dejar en el frigo.
Calentamos la leche y añadimos las yemas con el azúcar sin que llegue a hervir.
Añadimos la gelatina previamente hidratada y el turrón desmenuzado y mezclamos.
Mientras enfría montamos la nata , la dejamos semimontada.
Mezclamos la crema de turrón poco a poco con la nata con movimiento envolvente. Dejamos reposar en el frigo.
Para hacer los pasteles:
En versión piñones:
Se pone la crema en la manga con una boquilla lisa mediana. Se va poniendo crema sobre la mitad de las galletas. Se tapa con otra galleta, y listo para llevar a la boca.
Y en versión especial pistacho y hierbabuena, dedicada a Alicia: (Con el mejor de los deseos, siempre)
Feliz Noche a tod@s.
Espero que os guste.
* Con estas cantidades salen unas 40 galletas (20 pastelitos).
*Es preferible tener las galletas listas y la crema en la manga y hacer los pasteles en el último momento para que se conserven crujientes.