15 febrero 2011
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12:08
Llevaba unos días sin entrar al foro, bastante liada entre mudanza y Nana ( la gata de mi hija) con una cesarea que se complicó. Y los ánimos de aquella manerilla…. Así que a preparar un plato que me gusta…
Tenía pendientes estas croquetas y el domingo las hice de aperitivo. Si digo que estaban buenísimas ( a mí esta morcilla me encanta) no exagero, y eso mismo debieron pensar mis padres, porque no hubo la mas mínima objeción, ni ninguna alusión a la dieta…
Imagino que es una morcilla que puede encontrarse en Castilla-León en muchos sitios, pero mi preferida es esta de Salamanca.
Se cortan unas rodajas de morcilla, se le quita la piel y se pica muy fina.
Se fríe en aceite caliente ( no mucha cantidad para que el sabor quede bien concentrado)
hasta que esté ligeramente crujiente, se escurre y se reserva.
Se cuela el aceite en un cazo o donde vayamos a hacer la bechamel.
Se añaden dos cucharadas colmadas de harina y la sal se rehogan en el aceite. Se empieza a añadir poco a poco la leche sin dejar de remover para que se integre bien y no forme grumos.
Cocemos unos segundos antes de añadir el siguiente chorro de leche. Así hasta que esté a nuestro gusto de espesa ( yo puse ¾ l aprox),
se le añade la morcilla que habíamos reservado frita, se mezcla bien y se cuece dos o tres minutos, se prueba de sal
y se saca a una bandeja y se alisa la superficie con una espátula. Se deja enfriar.
Se cortan las croquetas ( en este caso en cuadrados) se pasan por pan rallado, huevo batido y otra vez por pan.
Se fríen en una sartén honda con aceite bien caliente.
Se sacan sobre papel de cocina… los impacientes cuidadín! Qué queman…
Imagino que es una morcilla que puede encontrarse en Castilla-León en muchos sitios, pero mi preferida es esta de Salamanca.
Se cortan unas rodajas de morcilla, se le quita la piel y se pica muy fina.
Se fríe en aceite caliente ( no mucha cantidad para que el sabor quede bien concentrado)
hasta que esté ligeramente crujiente, se escurre y se reserva.
Se cuela el aceite en un cazo o donde vayamos a hacer la bechamel.
Se añaden dos cucharadas colmadas de harina y la sal se rehogan en el aceite. Se empieza a añadir poco a poco la leche sin dejar de remover para que se integre bien y no forme grumos.
Cocemos unos segundos antes de añadir el siguiente chorro de leche. Así hasta que esté a nuestro gusto de espesa ( yo puse ¾ l aprox),
se le añade la morcilla que habíamos reservado frita, se mezcla bien y se cuece dos o tres minutos, se prueba de sal
y se saca a una bandeja y se alisa la superficie con una espátula. Se deja enfriar.
Se cortan las croquetas ( en este caso en cuadrados) se pasan por pan rallado, huevo batido y otra vez por pan.
Se fríen en una sartén honda con aceite bien caliente.
Se sacan sobre papel de cocina… los impacientes cuidadín! Qué queman…