15 febrero 2011
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11:56
Receta de aprovechamiento total.
Aprovecho que estáis distraid@s con los regalitos del AI, porque ya sé que la morcilla es un plato “difícil” y que no gusta a mucha gente.
Y aprovecho unas hojas de filo para terminar con el paquete… y ya puesta, aprovecho para daros las gracias por la buena acogida que siempre me dáis.
Es una morcilla fresca, de Salamanca, que a mí me encanta. No es la primera receta que hago con ella, he puesto revuelto, croquetas … pero, sin receta ni nada, unas rodajas fritas con un huevo hacen una cena de capricho.
Ingredientes: cebolla ligeramente caramelizada con piñones, morcilla fresca, pasta filo, mantequilla para untar.
Se cortan los aros de cebolla en la mandolina. Se rehogan en la sartén con una cucharada de aceite o mantequilla.
Cuando empiezan a estar dorados,
añadimos una cucharadita de azúcar,y dejamos que se funda mezclando bien con la cebolla.
Echamos los piñones, le damos una vuelta y sacamos del fuego.
Troceamos la morcilla en daditos y la desgrasamos en una sartén muy caliente.
Tiene que quedar un poco crujiente por fuera.
Cortamos las hojas de filo a la medida de las crepinetas que vayamos a hacer. Superponemos cuatro hojas untadas en mantequilla ( o en aceite).
En el centro colocamos una cucharada de cebolla y piñones.
Encima ponemos la morcilla.
Enrollamos y cerramos el paquete.
Lo horneamos a 180º hasta que estén doradas.
Se pueden acompañar con una salsa de piquillos.
Espero que os gusten. (Al menos a quienes aceptáis morcilla como … comestible.)
Y aprovecho unas hojas de filo para terminar con el paquete… y ya puesta, aprovecho para daros las gracias por la buena acogida que siempre me dáis.
Es una morcilla fresca, de Salamanca, que a mí me encanta. No es la primera receta que hago con ella, he puesto revuelto, croquetas … pero, sin receta ni nada, unas rodajas fritas con un huevo hacen una cena de capricho.
Ingredientes: cebolla ligeramente caramelizada con piñones, morcilla fresca, pasta filo, mantequilla para untar.
Se cortan los aros de cebolla en la mandolina. Se rehogan en la sartén con una cucharada de aceite o mantequilla.
Cuando empiezan a estar dorados,
añadimos una cucharadita de azúcar,y dejamos que se funda mezclando bien con la cebolla.
Echamos los piñones, le damos una vuelta y sacamos del fuego.
Troceamos la morcilla en daditos y la desgrasamos en una sartén muy caliente.
Tiene que quedar un poco crujiente por fuera.
Cortamos las hojas de filo a la medida de las crepinetas que vayamos a hacer. Superponemos cuatro hojas untadas en mantequilla ( o en aceite).
En el centro colocamos una cucharada de cebolla y piñones.
Encima ponemos la morcilla.
Enrollamos y cerramos el paquete.
Lo horneamos a 180º hasta que estén doradas.
Se pueden acompañar con una salsa de piquillos.
Espero que os gusten. (Al menos a quienes aceptáis morcilla como … comestible.)