Las compotas tradicionales y básicas se hacen cociendo la fruta en agua y azúcar, aromatizadas con canela, vainilla, piel de limón, a nuestra elección.
Esta compota tiene algunas variaciones sobre la receta clásica. La manzana está cocida en sidra, con las pieles y corazones de la fruta y sin poner azúcar en la cocción. En un segundo momento se acaba de hacer la compota con el azúcar y la gelatina de sidra que resulta de cocer las pieles.Es una forma de aprovechar al máximo todos beneficios de la manzana.
El resultado es una compota en la que la manzana conserva un punto ácido, en contraste con la envoltura dulce y la textura de la gelatina.
Ingredientes
4 manzanas stark, fuji, granny smith... ( no son adecuadas las golden, ni las reineta)
Un vaso grande de sidra
4 cucharadas de azúcar
Canela en rama, piel de limón (opcional)
Se lavan las manzanas para poder usar la piel. Se pelan y se descorazonan.Se cortan las manzanas en cuartos. Se pone en una olla, las pieles, los corazones, el vaso de sidra y encima las manzanas cortadas.Si se quiere, se puede añadir un palo de canela, piel de limón o una vainilla (yo no he puesto). Se cuece a fuego medio hasta que las manzanas estén tiernas.
Se retiran las manzanas y se ponen en una sartén honda, se les añade el azúcar.
Se cuela el caldo de cocer pieles y manzanas y se agrega a la sartén en la que vamos a acabar de hacer la compota.
A fuego medio se deja reducir la salsa, moviendo de vez en cuando la sartén (sin remover las manzanas). Cuando empiece a caramelizarse el azúcar y coja un color dorado el almíbar, retiramos del fuego y dejamos enfríar.
Se sirven napadas con unas cucharadas del almibar.
Espero que os guste