Casi todas las visitas de María vienen con recetas nuevas y yo la espero también con nuevos platos que creo que le van a gustar.
Esta vez el intercambio fue de shiitakes rellenas por un delicioso arroz con verduras, que le preparó en el trabajo Antonio.
La receta viene pormenorizada al máximo, minuto a minuto, ingrediente por ingrediente, solo le falta las instrucciones para comerla. Sin duda, Antonio es, además de buen cocinero un estupendo profesor.
Ingredientes para dos personas:
200 g de arroz
8 judías verdes
¼ pimiento rojo
¼ pimiento verde
1 cebolleta pequeña
2 dientes de ajo
2 tallos de brócoli
3 alcachofas
2 tomates pera
Sal
75 ml de aceite
3 medidas (de las del arroz) de caldo o agua (3/4 de litro aproximadamente)
1 cucharadita pimentón
Azafrán en hebra
Colorante al gusto.
Limpiamos y cortamos las verduras, las judías y los pimientos en dados, la cebolla en brunoise muy fina, el ajo en láminas, el brócoli en ramitos pequeños. Rallamos los tomates y dejamos las alcachofas para el final para que no de oxiden, las cortamos en octavos.
Ponemos el aceite en una sartén amplia (o en la paella) y doramos los ajos. Los retiramos cuando estén bien dorados para que no amarguen.
Empezamos poniendo las judías y de cinco en cinco minutos vamos añadiendo el pimiento rojo, el pimiento verde, el brócoli, las alcachofas y la cebolleta, ponemos una pizca de sal. Cuando estén pochados añadimos el tomate rallado y dejamos que pierda el agua.
Ponemos el pimentón, removemos e inmediatamente le ponemos el caldo (para que no se queme el pimentón). Se ponen tres medidas de caldo por una medida del arroz. Se cuece 20 minutos a fuego suave. Pasado este tiempo nos quedará el caldo justo para el arroz.
Echamos el arroz, el azafrán, el colorante y probamos de sal. Cocemos a fuego medio 15 minutos.
Apagamos y dejamos reposar 10 minutos tapado con un paño o un papel de cocina.
Si vemos que se va quedando seco antes de los 15 minutos, bajamos un poco el fuego o añadimos un poco más de caldo.
Pasado el tiempo de reposo está listo para servir y disfrutar.
Gracias, Antonio, por cuidar tan bien a María, y gracias por el azafrán que ha llenado de la despensa de un aroma increíble.
Espero que os guste.