Conociéndome es fácil deducir que no es imprescindible ser triatleta para tomar un buen plato de este cuscús. Cuando María viene a pasar unos días suele traer la receta de algún plato que ha probado y la preparamos en casa. Hacía tiempo que venía hablándome del cuscús que hacen unos compañeros, Laura y José Manuel y esta vez vino con la receta y la advertencia de “no vayas a poner cuscús de Laura y José Manuel, que no es nuestra, no sé de dónde la sacamos”. Oído cocina, como Jose es triatleta y la tiene incluida en su dieta, el nombre sale del tirón: Cuscús de triatleta.
He seguido la receta al pie de la letra, pero se adapta fácilmente al gusto personal, quitando, añadiendo, cambiando ingredientes.
Ingredientes (para dos personas)
150 g de cuscús
150g de pechuga de pollo
50 g de queso de cabra o feta
50 g de nueces
50 g de pasas sin semillas
½ berenjena
3 cucharadas de aceite
Zumo de limón (al gusto)
Sal
Una nuez de mantequilla (opcional)
Empezamos por asar la pechuga de pollo en filetes, ponemos sal y un hilo de aceite.
En otra bandeja asamos la berenjena en rodajas.
Mientras se asan, vamos picando el resto de ingredientes y preparando el aliño con las cucharadas de aceite, el zumo de limón y sal.
Cuando la berenjena y el pollo también los cortamos en trocitos.
Para preparar el cuscús, lo medimos y ponemos el mismo volumen de líquido (agua o caldo) a calentar, hasta que rompa a hervir. Echamos el cuscús y dejamos reposar 5 minutos.
Pasado este tiempo removemos y si queremos ponemos la nuez de mantequilla (María no la puso). Vamos añadiendo los ingredientes picados y mezclando.
Por ultimo ponemos el aliño y mezclamos bien.
Es un plato que se puede tomar caliente o frio (tibio).
Me ha gustado mucho, a pesar de las miradas inquisitivas de María, y de que no quedara muy convencida de que me gustara.
Espero que os guste.