Una forma sencilla de preparar unas gulas en revuelto con un punto distinto. Este plato hecho con bacalao es típico portugués, bacalhau douro o bacalhau à brás, que es una delicia. Me gustó el resultado de este revuelto con gulas y creo que nos arregla una cena en un pispás.
Los ingredientes son de los que normalmente tenemos en casa (yo suelo tener siempre una bandeja de gulas en el frigo o en el congelador): huevos, patatas, cebolla…
Ingredientes por persona:
100 g. de gulas
1 patata mediana
½ cebolla pequeña
2 huevos
Sal
Ajo molido
Perejil picado
Pelamos la cebolla y la patata. Cortamos la cebolla en pluma y la patata en paja. Salamos ligeramente las patatas ( las gulas suelen tener bastante sal).
Ponemos aceite en dos sartenes y calentamos. En una freímos la cebolla y en otra las patatas. La cebolla tiene que quedar frita, no pochada, y sin llegar a dorarse mucho. Las patatas se fríen en aceite caliente, y si hacemos cantidad las freímos en tandas para que queden crujientes.
Sacamos las patatas y la cebolla.
Quitamos el aceite de la sartén grande para rehogar un momento las gulas con un poco de ajo molido. Añadimos a la sartén las patatas y la cebolla fritas y mezclamos.
Batimos los huevos y les ponemos sal. Echamos el batido sobre las gulas, patatas y cebolla. Bajamos el fuego casi al mínimo y removemos para que no cuaje como una tortilla y el revuelto quede jugoso.
Retiramos cuando aún le falte un poco del punto que nos guste para que acabe haciéndose con el calor de la sartén. Sacamos al plato o a la fuente y espolvoreamos con perejil picado.
Si queremos aproximarnos más a la receta portuguesa le ponemos, también por encima, unas aceitunas negras.
Espero que os guste.