Después del mal trago que os hice pasar con los riñones, vamos a endulzarnos un poco la comida. Un postre frutal, de piña. Hace unas semanas preparé una crema de piña que se podía servir tanto en copas como en las piñas baby.
La piña rellena también podría ponerse en copas, pero lo suyo es usar la propia piña porque en la receta usamos toda la pulpa y para que se vayan a la basura las piñas vaciadas mejor las usamos, que quedan más monas.
Se vacían las piñas conservando parte de las hojas, troceamos la pulpa o si la hemos vaciado con el sacabolas reservamos las bolitas.
Una vez vaciadas, las secamos bien con papel de cocina.
Ingredientes:
Una piña
2 yemas y un huevo
150g de azúcar
300 ml de leche
30 g de maizena
Piel de limón
Calela en rama o vainilla
Hacemos una crema con 2 yemas y un huevo, 300ml de leche, 30g de maizena y 150g de azúcar. La leche la aromatizamos con piel de limón y canela o si os gusta más con una vainilla.
Si os ha quedado algo de pulpa pegada a la piña y el zumo lo trituramos y lo añadimos a la crema en el momento de cocerla.
La crema: infusionamos la leche con el limón canela o vainilla y el azúcar reservando una cucharada para facilitar la disolución de la maizena sin grumos. Dejamos entibiar la leche.
En el cazo ponemos las yemas, el huevo, la cucharada de azúcar y la maizena, mezclamos bien con las varillas y vamos añadiendo la leche.
Llevamos al fuego y sin dejar de remover esperamos a que espese y en cuanto empiece a hervir retiramos.
Reservamos unas cucharadas de crema para ponerlas por encima y alisar las piñas.
Añadimos los trocitos de piña a la crema restante y mezclamos bien.
Rellenamos las mitades de piña vaciadas y bien secadas con papel de cocina.
Alisamos las piñas con la crema reservada ayudándonos con la espátula.
Espolvoreamos con azúcar y quemamos con el soplete o con la pala.
Espero que os guste.